Chile en nogada, receta e historia de una tradición mexicana

Todo lo que debes saber sobre los chiles en nogada mexicanos

200 años de historia en un platillo que lleva los colores y el sabor de México

Empecemos por definir qué es un chile en nogada.

Un chile en nogada es un platillo típico de la gastronomía mexicana, especialmente popular durante las celebraciones de las fiestas patrias en septiembre. Se caracteriza por su presentación colorida y por representar los colores de la bandera mexicana: verde, blanco y rojo. 

Consiste en un chile poblano grande relleno de una mezcla de carne molida (generalmente de res) combinada con una variedad de ingredientes dulces y salados, como frutas y frutos secos.

El relleno puede incluir ingredientes como carne de cerdo o res, almendras, pasas, piñones, duraznos, manzanas y peras, entre otros. Los chiles se asan y pelan para luego ser rellenos con esta mezcla. 

El toque distintivo de este platillo es la "nogada", una salsa blanca y espesa elaborada principalmente con nueces de castilla peladas, crema de leche, queso y otros ingredientes, que se vierte sobre los chiles rellenos. La nogada le da un sabor cremoso y suave al platillo, mientras que los ingredientes del relleno aportan un contraste de sabores y texturas. 

El platillo se adorna con granos de granada fresca y perejil picado, que le agregan colores adicionales que representan los colores de la bandera mexicana. Por lo tanto, es un plato que no solo es apreciado por su sabor, sino también por su significado cultural y su presentación visualmente atractiva.   

Receta de chile en nogada

Aquí tienes una receta básica para preparar chiles en nogada, un platillo tradicional mexicano que se sirve comúnmente durante las fiestas patrias en septiembre.  

Esta receta es para aproximadamente 6 porciones.

Ingredientes:

Para los chiles:

• 6 chiles poblanos grandes 
• 500 g de carne molida de res 
• 1/2 cebolla, finamente picada 
• 2 dientes de ajo, finamente picados 
• 1/2 taza de pasas 
• 1/2 taza de almendras picadas 
• 1/2 taza de duraznos en almíbar, picados 
• 1/2 taza de pera en almíbar, picada 
• 1/2 taza de manzana en almíbar, picada 
• 1/2 taza de piñones 
• 1/2 cucharadita de canela en polvo 
• 1/2 cucharadita de pimienta 
• 1/2 cucharadita de comino en polvo
• Aceite vegetal
• Sal al gusto

Para la nogada: 

• 1 taza de nueces de castilla peladas 
• 200 ml de crema de leche 
• 100 g de queso crema 
• 1/4 de taza de leche 
• 1 pizca de azúcar
• Sal al gusto

Para decorar: 

• 1/2 taza de granos de granada 
• 1/2 taza de perejil picado 
• 1/2 taza de nueces de castilla peladas

Instrucciones:

1. Asa los chiles poblanos sobre una llama o en un comal caliente hasta que su piel esté completamente quemada. Colócalos en una bolsa de plástico cerrada durante unos minutos para que suden. Luego, pela la piel, córtalos con cuidado en un costado y retira las semillas y venas. Reserva. 
   
   
2. En una sartén grande, calienta un poco de aceite y sofríe la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes. Agrega la carne molida y cocina hasta que esté dorada. Agrega las pasas, almendras, piñones, duraznos, pera, manzana, canela, pimienta, comino y sal. Cocina por unos minutos hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados. Reserva. 
   
   
3. Rellena los chiles con la mezcla de carne y frutas con cuidado para no romperlos. Ciérralos con palillos si es necesario.
   
   
4. Para la nogada, licua las nueces, la crema de leche, el queso crema, la leche, el azúcar y la sal hasta obtener una salsa suave y espesa. 
   
   
5. Baña los chiles con la salsa de nogada y decora con los granos de granada, el perejil picado y más nueces. Refrigera los chiles en nogada durante al menos 1 hora antes de servir.

Los chiles en nogada son un platillo laborioso pero delicioso. ¡Espero que disfrutes preparándolos y saboreándolos! 

La historia del chile en nogada 

La historia de los chiles en nogada es rica y tiene sus raíces en el México del siglo XIX. Se dice que este platillo fue creado por monjas agustinas en Puebla, específicamente en el Convento de Santa Mónica, en honor a Agustín de Iturbide, quien fue un líder militar que contribuyó a la independencia de México y más tarde se convirtió en emperador del país.

La leyenda cuenta que, durante una visita de Iturbide a Puebla en 1821, las monjas del convento quisieron crear un platillo especial para honrarlo y celebrar su santo, que coincide con la temporada en la que las nueces de castilla están en su punto máximo de madurez.

Las monjas crearon el chile en nogada como un tributo a Iturbide y a los colores de la bandera mexicana, utilizando ingredientes de la región y nueces frescas para elaborar la nogada.

La receta original evolucionó a lo largo del tiempo y se convirtió en un platillo icónico de la gastronomía mexicana. Los colores y sabores del chile en nogada, que representan la bandera de México, hacen de este platillo una opción popular durante las festividades del mes de septiembre, que incluyen el Día de la Independencia de México.

A lo largo de los años, los chiles en nogada han ganado renombre tanto dentro como fuera de México debido a su sabor único y a la historia que lleva consigo. Cada año, durante la temporada de chiles en nogada, muchos restaurantes y hogares mexicanos se dedican a preparar y disfrutar de este platillo tradicional.